GHOST IN THE SHELL, VIGILANTE DEL FUTURO, EL ALMA DE LA MÁQUINA
Por Miguel Ernesto Yusty
Estos tres títulos dados a una misma película en diferentes lenguas o distintos continentes, se complementan para dar una idea integral del film del inglés Rupert Sanders. Este se basa en la obra de dibujos animados, GHOST IN THE SHELL de 1995, que es un hito para los amantes de la ciencia ficción. La presente obra de 2017 conserva de forma arriesgada, una estética similar a la de su predecesora, haciendo pensar que su mirada del futuro, se mantiene congelada en el tiempo. Ello se refleja en el manejo del color, el diseño de los espacios urbanos o el de los automóviles, cuadrados, como en las series japonesas de los años 80 y 90.
Aunque el atractivo para el público podría ser la actriz Scarlett Johansson desempeñando el rol de protagonista, es quizás más interesante la aparición de Takeshi Kitano, hablando en japonés subtitulado, en una película en la que en su gran mayoría se habla inglés, aunque todo suceda en el Japón del futuro. La película es un triller y es entretenida. Es interesante por su profunda reflexión sobre aquello que define el espíritu humano, es decir, la capacidad del individuo para cuestionase sobre el sentido de su propia vida.
GHOST IN THE SHELL es estrenada en una coyuntura favorable. En 2017 llegará a las carteleras la segunda parte de BLADE RUNNER, basada en otra icónica pieza de ciencia ficción, en este caso de la década del 80. En ambas se recrea el escenario hipotético de robots que luchan para que la sociedad les reconozca su humanidad. Aunque la asistencia del público a las salas de cine no ha sido masiva, GHOST IN THE SHELL tiene sobradas cualidades para convertirse en pieza de culto y tal como aconteció con la primera entrega de BLADE RUNNER, ésta, irá mostrando sus méritos con el paso del tiempo.