BIRDMAN

Por Miguel Ernesto Yusty

BIRDMAN es la película de Alejandro González Iñárritu estrenada en 2014 y que raya la maestría por la conjunción entre la historia escrita y su puesta en escena. La obra fue un éxito tanto de crítica, como de taquilla, sin que por ello su visión autoral se viera limitada. BIRDMAN es un análisis profundo de la naturaleza humana y un ejercicio de experimentación audiovisual que logra hacer honor a la idea del cine como espectáculo.

El director crea una ilusión de realidad en la que la cámara es protagonista. A ojos del espectador, ésta nunca deja de registrar imágenes, como si rodara un plano secuencia ininterrumpido, como si estuviera afirmando que la vida solo se detiene cuando termina. Esta realidad ficticia se confunde con la realidad real cuando Michael Keaton, el actor que interpreta al personaje principal y que alcanzó la fama, décadas atrás, gracias a su interpretación de Batman, representa ahora a otro actor, a quien le ha sucedido algo similar y trata que de recuperar la visibilidad perdida.

La pregunta sobre lo que es real o no, se replantea al situar la acción en el mundo del teatro. González Iñárritu sigue al protagonista mientras ensaya, sin que haya interrupción, lo acompaña en su cotidianidad y luego va con él hasta el escenario, ante el público. No hay una barrera que separe los tres universos, realidad, ensayos y espectáculo, no hay cuarta pared. La película hace pensar que la realidad es una sola y que gracias al cine, ésta no es lo que se vive, si no lo que se muestra.