

POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY
Como su nombre lo indica, JOHN WICK 4 es la cuarta entrega de la saga de películas sobre un integrante de la mafia rusa que cuando se retira del mundo del delito, es nuevamente arrastrado a la delincuencia para vengar la muerte de su perro a manos de un grupo de ladrones. Este hecho, el robo, da al personaje motivación suficiente para justificar cada uno de sus actos violentos y tener al público de su lado, por que nada genera más empatía que la defensa de animalitos desvalidos. Las consecuencias de esa venganza tienen eco hasta que el protagonista, interpretado por Keanu Reves, llega a este cuarto filme.
El cuarteto de películas es dirigido por Chat Stahelski, un antiguo doble de escenas de riesgo, que se convierte en coreógrafo y que en la actualidad ha sabido tomar el conocimiento aprendido en la actuación de escenas de acción, para aplicarlo a la puesta escena como director. De esta forma consigue que las luchas cuerpo a cuerpo sean una bella danza de la muerte. Para dar sustento a esta afirmación, se invita a los lectores a ver su trabajo como coreógrafo de batallas en la película de 2006, 300. En JOHN WICK 4, el nivel de violencia hastía a pocos espectadores y por el contrario atrae a muchos debido a la estización del acto de matar.
John Wick se convierte en el vengador que la sociedad planetaria reclama. Hombre sensible, viudo y con debilidad por las mascotas, tiene patente de corso para ejecutar delincuentes. El público no lo abandona porque los filmes cuentan con una dirección de fotografía preciosista que convierte cada plano en una ilustración. Los espectadores no tienen escapatoria, al punto de creer que el mundo de JOHN WICK 4, es el deber ser de la vida. ¿Esto los transforma en asesinos implacables? No, pero si en individuos que encuentran sanación a su condición de víctimas del salvajismo de la vida cotidiana. La moral, la ley, la ética, el temor, evitan que el espectador se convierta en émulo del protagonista interpretado por Keanu Reves. Aunque por momentos las peleas lucen reales, con un parpadeo el cinéfilo descubre que se encuentra en la sala de cine. Pero ese escape a la ficción, en el que el sujeto salda su cuenta de pendientes con el “mundo”, es la razón para el éxito contundente de esta saga de películas.
POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY
EL VIAJE DE LA MARIMBA es el documental que dirige Marino Aguado y que se estrena en el festival de Cine de Cartagena en 2023. Aguado es conocido por tratar temas de interés cultural, así lo demuestra su trabajo anterior, exhibido en 2020, ZAPATA EL GRAN PUTAS. Ahora, con EL VIAJE DE LA MARIMBA busca los orígenes del instrumento musical desde el continente africano, pasando por Europa, hasta llegar a tierras americanas, tanto las del norte como las del sur. Es un proyecto de la televisión pública regional de Colombia a cargo de Telepacífico, en equipo con Señal Colombia, el canal público de cubrimiento nacional.
EL VIAJE DE LA MARIMBA es un documental de características cinematográficas que se origina en un canal de televisión y que se estrena en un festival de cine. En él, se ve reflejado el camino que ha seguido la producción cinematográfica en Colombia, donde hubo un importante desarrollo en la producción de largometrajes durante los años 80 del siglo pasado que permitió la formación de un gran número de profesionales, que al ser absorbidos por la televisión, dieron lugar a una época dorada para este medio. Entonces es interesante ver como hoy, en el siglo XXI, las obras como EL VIAJE DE LA MARIMBA pasan del universo televisivo al de las salas de cine.
El cambio tecnológico ha permitido que las obras de talentosos directores como Aguado, puedan transitar de un medio al otro. Además del uso adecuado de las nuevas herramientas, el trabajo administrativo de gerentes como Ricardo Bermudez, crea las condiciones para que estos proyectos cinematográficos de gran embergadura se lleven a cabo. Gracias a ellos, EL VIAJE DE LA MARIMBA es también el viaje del cine, que se adapta a las nuevas circunstancia para contar las historias que son necesarias para entender, con imágenes y sonidos, la evolución de los procesos culturales.
Si desea saber más sobre el trabajo de Marino Aguado, estas son dos de nuestras publicaciones al respecto:
.BUSCA POR DENTRO: http://www.tintacinefila.com/busca-por-dentro-el-documental/
.ZAPATA, EL GRAN PUTAS: http://www.tintacinefila.com/la-voz-del-cine-zapata-el-gran-putas/
POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY
¡SHAZAM! LA FURIA DE LOS DIOSES, es la segunda entrega de la saga que comienza en 2019, basada en un clásico personaje del cómic de DC. La película cuenta las aventuras de un adolescente que es favorecido con poderes desmesurados, para que pueda enfrentar a las fuerzas del mal. Huérfano él, aprovecha su poder para compartir sus dones con sus hermanos adoptivos. La característica principal del personaje viene de su corta edad, porque cuando las situaciones son más complejas, su inexperiencia lo lleva a tomar solución inesperados y divertidas.
La segunda parte de ¡SHAZAM! LA FURIA DE LOS DIOSES no ha calado positivamente en la crítica. Quizá el problema sea la mezcla entre diferentes mitologías, al convertir en antagonistas del héroe a deidades del panteón griego, en una época en la que los personajes ya no tienen orígenes mediterráneos. Otra molestia podría ser que el protagonista, un joven inexperto, no se toma en serio el riesgo que representan sus enemigos. Ese detalle, que años atrás lo hacía divertido, en 2023 no conecta con los espectadores. No se puede negar que estos son tiempos de pesadumbre, en los que la broma ante la tragedia no hace gracia a los asistentes a las salas. Es probable que el público esté pidiendo personajes con reacciones acordes a la fatalidad del mundo que los rodea.
Donde si se presenta una preocupación real, es en la desconexión de unos superhéroes con otros ¿Si Supermán está en el mismo planeta que Shazam, porque no se ayudan entre ellos? ¿Por qué Batman no los apoya también? ¿Que pasa con los guionistas? ¿Temen que tanto superhéroe termine con todos los males del mundo y no habría nada más que contar? Algo deberán inventar los creadores de historias para dar coherencia a estos relatos, porque de otra forma será el fin de esta veta narrativa. ¡SHAZAM! LA FURIA DE LOS DIOSES si es divertida, pero el universo creado por su guionista no es coherente.
POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY
EL PESO DEL TALENTO, también llamada EL INSOPORTABLE PESO DE UN TALENTO DESCOMUNAL, es un filme de ficción estrenado en 2022, que luego de su recorrido por salas de cine, puede ser visto por Amazon Prime Video. En la película, el personaje protagonista es un “Nicolas Cage” que es interpretado por el actor Nicolas Cage. Se trata de una comedia de enredos en la que todos están confundidos y nada es lo que parece. La película es casi que un auto homenaje del actor, del propio Nicolas, a sus más celebres interpretaciones. El hoomenaje no molesta, pero si requiere que el espectador haya visto algunas de sus películas para comprender el nivel de paroxismo al que llegan los otros personajes, quienes dentro de la misma historia, son fanáticos de Cage. En este caso, el admirador número uno del actor en la historia, es el personaje interpretado por Pedro Pascal. Entre los dos, Cage y Pascal, saben dar a la película el tono de comedia alocada que la hace encantadora.
Nicolas Cage es un actor que practica un estilo expresionista. El expresionismo en el cine se relaciona con películas como EL GABINETE DEL DOCTOR CALIGARI, de 1920, en la que la expresividad de los actores, sus rostros, sus posturas corporales, están ligadas a la fuerza emocional de los personajes, dejando de lado la búsqueda del realismo. Vista en la actualidad, un filme como éste parecería exagerado, pero buena parte de los trabajos sobresalientes y aclamados de Cage, se han beneficiado de esta influencia. De tal forma que si el actor no encuentra guiones y directores que sintonicen son su estilo, sus interpretaciones pueden lucir fuera de lugar y de alguna manera, EL PESO DEL TALENTO solventa esta sensación.
El drama del protagonista de EL PESO DEL TALENTO, es no ser contratado y por eso decide abandonar su oficio. La situación es similar a la que vive el actor en la realidad, que trabaja en muchas películas que no se comparan con sus grandes obras de antaño. Por eso EL PESO DEL TALENTO es una reflexión sobre la fama, el paso del tiempo, la vida, el arte y sobre todo, el cine. En este listado temático cabe todo tipo de público, pero sobre todo, están presentes aquellos para quienes las películas significan una parte fundamental de su tejido afectivo… ¿Si cree que esta última afirmación no tiene nada que ver con usted? Solo piense cuanto tiempo permanece ante una pantalla, ya sea de teléfono, computador o de un televisor y verá que usted también es uno de nosotros, un cinéfilo incurable.
POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY
DAISY JONES & THE SIX o como se la conoce en países de habla castellana, TODOS QUIEREN A DAISY JONES es una serie de televisión producida por AMAZON, que se basa en una novela homónima escrita por Taylor Jenkins Reid, que habla sobre un grupo musical similar al conjunto británico Fleedwood Mac. La historia sucede en California durante los años 70s y mezcla el amor romántico con la ferviente necesidad de hacer música de un grupo de amigos dispuestos a todo por hacer que el arte ocupe todos los momentos de sus vidas. Como en otras propuestas con temática similar la frase “ sexo, drogas y rock and roll” es preponderante, pero aquí se incluyen en el relato otras miradas a las que se les da igual importancia.
En los roles principales se encuentran Reley Keough como Daisy, como el líder de los “Six”, los seis, está Sam Clafin. Ambos actores y también músicos saben dar a sus interpretaciones la fuerza necesaria para hacer comprensibles los dramas que motivan las complejas personalidades de los dos protagonistas. En caso de Rely se suma a su experiencia vital como actriz, es ha vivido el mundo de la música de manera intensa al ser la nieta mayor de Elvis Presley. La serie sobrepasa la audiencia de nicho al dar a los dramas amorosos un buen porcentaje de la responsabilidad de cautivar al público.
POR: MIGUEL ERNESTO YUSTY